
Tijuana, Baja California, a 21 de julio del 2009.- El Programa de Atención y Prevención de Violencia Familiar, Sexual y de Genero de la Jurisdicción de Servicios de Salud II, ejecuta actualmente un programa de asesorías y consultas a las internas del CERESO de Tijuana, a fin de concientizarlas de la necesidad de elaborar un proyecto de vida que les permita modificar conductas que perjudican su bienestar y el de sus seres queridos.
El titular de la Jurisdicción de Servicios de Salud No. II, Dr. Ernesto Macareno Alvarado indicó que se contacto a las autoridades penitenciarias para iniciar entre las 400 internas un programa que incluye pláticas y sesiones individuales en los siguientes tópicos:
1.- Violencia Familiar
2.- Violencia Noviazgo
3.- Violencia Infarto Juvenil
4.- Violencia al Adulto Mayor
5.- Motivación Familiar
Incluir sesiones en este grupo población es parte de la estrategia del programa, dado que es incluyente y generalizado a todos los sectores poblacionales y grupos de edad, con mayor énfasis en mujeres.
“En ISESALUD visitamos colonias, escuelas, centros de desarrollo comunitarios, fábricas, universidades, centros de salud y centros laborales y un grupo importante es llegar también a los centros de estudio superior donde se forman a los futuros sicólogos, trabajadores sociales, criminólogos y abogados a fin de instruirlos sobre el tema. De igual forma surgió la iniciativa de llegar a un grupo vulnerable como las internas del Penal de La Mesa”, dijo el Jefe de la Jurisdicción de Servicios de Salud II, Dr. Ernesto Macareno Alvarado.
Actualmente se trabaja con más de 80 mujeres que tienen una edad entre los 18 y 28 años. Posteriormente se realizarán sesiones en pequeños grupos de 15 personas. Otro grupo de edad a abordar son las internas de 29 a 40 años y uno más de 41 o más.
Cabe mencionar que el Programa de Atención y Prevención a la Violencia Familiar, presta sus servicios de consulta en cuatro centros de salud: El Rubí, Francisco Villa, Mariano Matamoros y en Hospital General Tijuana. La finalidad es brindar la atención psicológica a la comunidad, abarcando los problemas de violencia familiar que se puedan presentar.