José Jesús Vázquez Hernández
Sin duda que los ojos del mundo están puestos en lo que está pasando en la Puerta del Sol en España, lo que parecía no tener una mayor trascendencia, ahora está siendo observado por muchos países como el nuestro, que afectados por problemas similares, en cualquier momento pueden seguir los mismos pasos dados por jóvenes españoles.
Un malestar en contra de todos los partidos políticos y de su gobierno, que han encausado al país hacia una crisis económica, que afecta a todas las clases sociales, pero en este caso particular a los jóvenes que después de terminar una carrera, tratan de encontrar trabajo digno y no lo logran.
Se quejan también de los candidatos, que a pesar de tener cuentas pendientes por corrupción, siguen siendo tomados en cuenta para ocupar cargos públicos, ya es hora de que los políticos hagan algo por los ciudadanos y no solamente velen por sus intereses particulares.
Los bancos no son la excepción, colaboran junto con los políticos en la asfixia que tiene sumergido al pueblo español, por los elevados intereses de los préstamos e hipotecas que tienen que conseguir para adquirir un hogar.
Dicen que no todo está mal, a pesar de que España no tiene una gran industria que la revitalice, sí cuentan con la industria del turismo, que sigue estable y que finalmente los robustece, pero no es suficiente, hace falta más construcción inmobiliaria, que es en parte lo que mas afecta su economía.
Contrario a lo que sucede en los países como Egipto, Siria, Libia, Yemen, etcétera, donde luchan por cambiar a sus autoridades y votar, en España ya descalifican la votación y su presencia en el Puerta del Sol, es pacífica, no han causado daños a los bienes de las personas, hasta ahora solo han influido para restarle votos al partido en el poder y dárselos a otro.
A simple vista, pareciera que son problemas exclusivos de un determinado sector del pueblo español, pero no, tienen una gran similitud con las quejas de millones de seres humanos que viven sumidos en la desesperanza, por la economía, el chantaje, la inseguridad, la impunidad, el desempleo y la corrupción de políticos de todos los partidos.
En México, ya se están dando algunos pasos, pues parece que nuestras autoridades solo atienden a aquellos que los expresan a gritos y sombrerazos, dicen escuchar a su pueblo, pero poco se refleja en la realidad, solo atienden asuntos que los pueda beneficiar económica y políticamente, las leyes o las retardan o no las aprueban y cuando así lo hacen, las redactan a su modo.
Ojalá no hubiera motivos para las manifestaciones públicas, pero una vez que solo queda este camino, qué mejor que sean pacíficas, Javier Sicilia ha estado empujando para que la ciudadanía también sea escuchada, dice que: “hay una queja tanto en Europa como de México por la partidocracia…” ya es hora de estar atentos y con la cara al Sol. jjesusva@hotmail.com
Mayo 25/2011
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